Nací a fines de los 80, y por tanto mi primera consola fue un Famicom. Me salté las consolas anteriores por mucho tiempo hasta que en mi adolescencia me picó un interés insalubre por la emulación y las consolas antiguas. Por razones obvias terminé probando los juegos de Atari 2600.

Ahí fue que recibí una puñalada en el oido: El 2600 desafina horriblemente.

https://www.youtube.com/watch?v=7V1vVnm2eOM

Estuve bastante tiempo buscando la razón de esto, y resulta que tiene que ver con el TIA (Television Interface Adapter), el procesador que es el corazón de la consola. Para bajar el costo lo mas posible, Atari había integrado  sonido, video y procesamiento en un solo chip, tomando muchos atajos para hacer la consola lo más barata posible. Como consecuencia, programar juegos para el 2600 era tan lindo como hacer un concurso de bebida con líquido de frenos.

Sediento?

Como era obvio, no iban a gastar memoria ni poder de procesamiento con funciones complicadas para definir cada nota, así que directamente cortaron la escala en intervalos iguales. En las notas mas graves suena bastante bien, pero a medida que se agudizan, también se agudiza el dolor de oido.

En algún momento voy a explicar los colores en las consolas de la época. Es un tema bastante parecido, que entre otras cosas explica por qué el Nintendo no tiene color amarillo. En serio. Fíjense.